Para tratar las causas profundas y trastornos médicos concomitantes al diagnóstico, debemos recabar información sobre:
Déficit de enzimas
Déficit de nutrientes
Trastornos de la motilidad intestinal
Intolerancia/sensibilidad alimentaria IgG
Disbiosis: bacterias, virus, parásitos, hongos patógenos
Hábitos alimentarios perjudiciales
Trastornos metabólicos
Disfunción inmunitaria (autoinmunidad, déficit inmunitario, inflamación crónica de bajo grado)
Desequilibrios de neurotransmisores
Trastornos endocrinológicos
Estrés negativo (distress)
Estrés oxidativo
Toxinas en sangre y órganos (fármacos- químicos- metales, plásticos- agrotóxicos y otros)
Estos trastornos pueden detectarse, investigarse, controlarse y tratarse de manera interdisciplinaria y apoyándonos en variados estudios complementarios de diagnóstico, debido a que estamos abordando un problema complejo de origen multicausal.